martes, 29 de octubre de 2013

CHOCOLATE ENVENENADO

«Una noticia tan buena como un exquisito bombón… de chocolate envenenado»
Semillas de cacao y chocolate elaborado (foto: El Mercurio)

Chocolate envenenado
¡El chocolate no sólo no engorda sino que adelgaza! Es la última noticia que nos ha traído un grupo de investigadores de la Universidad de Granada y que, gracias a la publicación en la revista norteamericana Nutrition, ha saltado triunfalmente a los teletipos. Ahora podemos deglutir sin temor el chocolate que  nos dé la gana.


En un estudio con 1458 jóvenes, un equipo de las facultades de Medicina y Deporte ha comprobado que la ingesta regular de chocolate tanto en personas delgadas como obesas reduce la grasa abdominal ¡independientemente de lo que se coma o del ejercicio que se haga! Un verdadero milagro, tan milagro que la industria chocolatera debe de estar frotándose las manos. ¡El negocio va a crecer más y más y más!


En otros tiempos hubo milagros semejantes cuando “rigurosos” estudios médicos certificaron que el tabaco ayudaba a combatir el estrés e intensificaba la concentración y la memoria. Mucho más cercano, el Congreso Internacional de Nutrición celebrado en septiembre en Granada proclamó apoteósicamente que el consumo de pan “favorece el adelgazamiento y reduce las posibilidades de padecer enfermedades cardiovasculares”. En letra pequeña te enterabas de que se refería al pan integral (que no es el que hacen pasar por integral en gran parte de las panaderías) y, además, acompañado de ejercicio físico. ¡Así cualquiera, vamos! He aquí el ejemplo de un titular interesado, más sospechoso aún por cuanto la buena nueva fue anunciada en un simposio organizado por la Unión Internacional de Panadería y Pastelería. ¿Pero qué van a decir los panaderos? Les conviene que la noticia sea equívoca, conocedores como son de que la mayoría de la gente sólo lee los titulares.


No sé si detrás del estudio que proclama las maravillas adelgazantes del chocolate se encuentra la industria chocolatera, pero el titular es tan nefasto como los de sus hermanos siameses. Indudablemente un consumo moderado de chocolate puro o casi puro  es bueno para la salud, pero el estudio habla de chocolate indiscriminado, en la forma que sea, tabletas, onzas, barritas, bombones… obviando que el chocolate comercial viene mezclado con azúcar, y que el consumo excesivo de ésta no es sólo una de las causas principales de la pandemia de obesidad occidental, sino que es hasta tal punto adictiva que en experimentos con ratas se la ha equiparado con la cocaína. El consumo de azúcar, que hoy día está no sólo en los dulces sino en gran parte de los alimentos salados industriales, lleva como en toda drogadicción a un aumento progresivo de la ingesta para lograr el primigenio efecto de fruición, aparte de producir un hambre voraz por la rapidez con que se procesan los glúcidos, lo que intensifica el deseo de más y más comida, fundamentalmente hidratos de carbono, es decir, puras inyecciones de grasa.


Luego la noticia de la lenidad del chocolate tal como se ha comunicado y difundido es una mina que socavará aún más la salud de la población. Aunque los investigadores granadinos aconsejan que el producto se tome con moderación, saben que esto no es posible y pecan de no prescribir la pureza en que debe ser consumido ni de precaver de sus peligros adictivos. Su noticia es buena como un exquisito bombón… de chocolate envenenado. Un paradisíaco placebo que envuelve una amarga ponzoña.
GREGORIO MORALES
Diario IDEAL, martes, 29 de septiembre, 2013


SECUENCIA DE ARTÍCULOS

-"Chocolate envenenado" por GREGORIO MORALES

-"¿Quién ha envenenado el chocolate?" por M. CUENCA GARCÍA, J. R. RUIZ, F. B. ORTEGA Y M. J. CASTILLO

-"Chocolate sin cacao" por GREGORIO MORALES

-"Cacao... mental" por M. CUENCA GARCÍA, J. R. RUIZ, F. B. ORTEGA y M. J. CASTILLO

-"El chocolate del loro" por GREGORIO MORALES

-"'Al loro' con el chocolateM. CUENCA GARCÍA, J. R. RUIZ, F. B. ORTEGA y M. J. CASTILLO

martes, 22 de octubre de 2013

ABSOLUTO

«¿No habrá nada, nada, que no cambie, que sea fiel e idéntico a sí mismo?» 

Foto de la Granada de mediados del siglo XIX con que Caja Granada anuncia su exposición "Una imagen de España. Fotógrafos estereocopistas franceses [1856-1867] (Centro de Exposiciones CajaGRANADA, Puerta Real, 10 de octubre de 2013 a 12 de enero 2014) 
Absoluto 

Impresionante la imagen que anuncia en la Acera del Casino la exposición sobre los fotógrafos estereoscopistas franceses. Sabemos que es Granada porque se muestran inconfundibles las torres de la Virgen de la Angustias, la linterna del palacio de Bibataubín y más lejos la iglesia de los Escolapios, ¡pero nada o muy poco del resto parece haber permanecido a pesar que sólo han transcurrido 150 años!
Extraño que siendo la misma, aquélla sea una ciudad radicalmente diferente de ésta. ¿Cómo es posible? Difícil de comprender que en un siglo y medio una ciudad cambie tan radicalmente. Y, sin embargo, todo en la vida es así. Son cambios graduales, imperceptibles, uno aquí, otro allá, pero que, a la larga, revelan lo que es la existencia: una transformación sin pausa, como los mares que hoy son montañas, como los gases que hoy son estrellas, como las estrellas que hoy son agujeros negros.
No hay nada permanente, sino un eterno cambio que hace suponer que el cosmos es un espejismo y que, como todo espejismo, fluctúa, tiembla, cambia de forma, se desvanece o se muestra. ¡Pobre de aquél que crea en la solidez! Lo sólido es un concepto de la mente pero no tiene existencia real. Como Granada no es la ciudad que fue hace 150 años ni la que será dentro de otros 150, así nuestra vida es también un vario y cambiante río.
Como aquellas civilizaciones perdidas que emergen estrato a estrato, desde el más moderno al más antiguo, así es nuestra biografía, una sucesión de capas, de yacimientos, de edades. He tenido ocasión de comprobarlo al entrar en la casa paterna y tener que oficiar de escrutador y tasador de cuanto allí se fue acumulando a lo largo de casi seis décadas, desde el matrimonio de mis padres hasta la muerte del último de ellos. De esta forma, ha ido apareciendo mi pasado, el reciente, mis novelas, mis artículos, mis viajes, pasando por el medio, mis hijos, mi boda, mis estudios universitarios, hasta llegar a la más lejana niñez, mis dibujos, mis juegos de ilusionista, las tarjetas, cartas y felicitaciones escritas a mis padres y hermanos, mis primeras calificaciones…
¡Qué vértigo! Era a la par Heinrich Schliemann  descubriendo Troya y Troya misma, era el investigador y el investigado, el hombre frío y lúcido que tasa el pasado y el hombre que contempla con emoción las metamorfosis de su vida. Gusano, crisálida, mariposa, así he sido, así somos, y si tenemos la ilusión de permanencia es porque los cambios circulan junto a nosotros a diferente ritmo, y el Sol, con un ciclo de miles de millones de años parece no cambiar, y una ciudad cambia sólo ligeramente, pero ahí están las fotos o las excavaciones de los arqueólogos o los cálculos de los científicos o la muerte de nuestros seres queridos para mostrarnos la impermanencia del mundo, desde lo más grande a lo más pequeño, desde las galaxias hasta nuestro propio corazón.
¿No habrá nada que no cambie, que sea fiel e idéntico a sí mismo? Tal vez la energía, dirían los físicos. Tal vez Dios, dirían los creyentes. Y uno comprende la larvada angustia de la humanidad y el ansia imperiosa de absoluto. Hasta Einstein intentó encontrarlo en la velocidad de la luz… ¡para toparse con la relatividad!

GREGORIO MORALES
Diario IDEAL, martes, 22 de octubre, 2013

martes, 15 de octubre de 2013

EL EXORCISTA

«El exorcista no está ni se le espera» 

Alcaldes de toda España reunidos en Madrid el domingo 13 de octubre de 2013 para protestar por la Ley de Racionalidad y Sostenibilidad de la Administración Local (foto: europapress.es
El exorcista 

El domingo se reunieron en Madrid políticos de todo signo salvo del partido gobernante, aunque les habría dislocado estar. ¡No, no era para pergeñar el famoso y cacareado “pacto contra la corrupción”! ¡Tampoco para tratar de encontrar soluciones al salvaje paro que asola España! ¡Ni mucho menos para reflexionar sobre el analfabeto funcional en que sus leyes han convertido al pobrecito español! No, no ¡estaría bien! para nada de eso. ¡Es que han visto peligrar canonjías, mamaderos y reparto de poder con la ley de administración local que se avecina! ¡Y no pueden tolerar que ahora vayan a abrevar del erario público menos “compañeros”!
Disfrazada de defensa de la Democracia y de la autonomía local, esta causa defiende míseros intereses, y eso que sólo se trastocan levemente con la ley en ciernes. No quieren escuchar que la inflación de políticos es el gran obstáculo para la modernidad de España. El presupuesto de la mayoría de los ayuntamientos, sostenido a base de engorrosos créditos que seguirán pagando nuestros tataranietos, se va en los sueldos de personal. ¿Para qué sirve entonces esta legión de representantes si se jalan lo que deberían emplear en bienes y servicios? El dinero que debe revertir en los ciudadanos cae en bocas voraces mientras urbes y pueblos quedan abandonados a la entropía. De cada 100 euros recaudados, un ayuntamiento como el de las Gabias (Granada), de solo 18.000 habitantes, se merienda 63 para gastos de personal. Por el mismo concepto, el ayuntamiento de Granada, con jurisdicción sobre 239.000 habitantes, abonó en 2012 ¡106 millones de euros! La tercera parte de su presupuesto. Pero si a esto añadimos que en intereses por créditos está pagando una cantidad que ronda los 20 millones anuales, sólo le quedan para gestionar la mitad de los ingresos. Deben de haberse graduado en Harvard ante tamaña pericia administrativa.
¡Cuánto mejor no sería licenciar a quienes abducen de esta forma el erario público! En ningún país civilizado se permitiría tan nefasta gestión. Y ahora, cuando con la tímida racionalidad que trata de imponer el Gobierno ven peligrar sus kiosquillos y no les salen la cuentas, protestan airadamente y se concentran en Madrid y hacen declaraciones apocalípticas como las de Noel López, alcalde de Maracena, como si el mundo se fuese a acabar porque no estarán ellos, al menos no todos, identificando tristemente su sopa boba con la sopa de los españoles, cuando es bien al contrario, ¡su supresión es una garantía! Menos políticos, menos sueldos públicos, más eficiencia, economía más saneada, más inversiones, menos gravámenes.
Como los vanos demagogos que son, estos especímenes tratan de hacernos confundir Democracia con abundancia de munícipes, autonomía local con profusión de minúsculos ayuntamientos, buenos servicios con inflación de empleados públicos, y agitan ese espíritu de campanario que hunde sus raíces en la España profunda y que es el mismo de Mas y Urkullu, ya que Cataluña y el País Vasco son profundamente España.
Qué difícil es el camino de la modernidad para este país que vivió una República minada, una Dictadura castradora y una Democracia corrupta. Así que ahí se han ido, a Madrid, y ahí seguirán yéndose, a manifestarse como ajados espectros, defendiendo intereses obsoletos con los que mantienen un macabro maleficio sobre España. ¡Y el exorcista no está ni se le espera!

GREGORIO MORALES
Diario IDEAL, martes, 15 de octubre, 2013

domingo, 13 de octubre de 2013

NIEBLAS Y ESPEJISMOS

«Susana Díaz está viviendo esa etapa que los psicólogos denominan infatuación»

Esta imagen define perfectamente lo que es la infatuación: un gatito que se ve, cree y piensa como un león (foto: Psicocorreo
Nieblas y espejismos 

Muchos ingenuos han creído ver algo nuevo en el discurso de la flamante presidenta de Andalucía. Normal en un país que se deja llevar por los espejismos y que seguiría con los ojos cerrados al flautista de Hamelín. Pero no hay nada nuevo en sus palabras, sino, por el contrario, el reforzamiento ad extremis de los más inveterados vicios de la clase política española. Antes de Susana Díaz, el propio partido era siempre honesto mientras los otros eran errados y corruptos. Tras Susana Díaz, todos son errados y corruptos… salvo la presidenta misma. De este modo se erige en adalid de la Democracia mientras los malos o los torpes son todos los demás. Es el viejo sistema pero estirado en clave de culto a la personalidad.
Susana Díaz está viviendo esa etapa que los psicólogos denominan infatuación, cuando de pronto la persona se cree elegida por el destino para llevar a cabo una misión trascendental. Y ante este objetivo, todo se achica y todos deben echarse a un lado, incluidos cargos, instituciones y leyes.
            Mientras enfervorizados aplaudidores ensalzaban un discurso donde culpaba a Zapatero, Rajoy y al Tribunal Constitucional de la actual ola secesionista catalana, otros más lúcidos arrugaban el ceño. Porque lo que traslucen sus críticas es todo un programa subliminal de lo que puede ser su presidencia.
            Veamos: Zapatero es en efecto culpable de gran parte del secesionismo por sus promesas de aceptación indiscriminada de un nuevo estatuto catalán, y porque todo esto abrió la veda de los segundos estatutos, a cada cual más atrabiliario y pintoresco. ¿Entonces estuvo mal que el partido de la oposición denunciara el error? ¿Fue incorrecto que no admitiera un Estatuto que vulneraba la igualdad de los españoles? ¿Y fue una provocación que el Tribunal Constitucional derogara algunos de estos artículos? Lo que Susana Díaz nos está diciendo es que una vez que Zapatero cometió el error, los demás deberían habérselo tragado. Es decir, el PP no tendría que haber ejercido oposición y el Tribunal Constitucional tendría que haber hecho la vista gorda. En definitiva, sobran la fiscalización de los partidos y el control de los jueces. ¡Terrible! ¿Qué no sucederá entonces con la legalidad en Andalucía?
            Lo más sombrío es que Susana Díaz y su partido no sólo no intentan corregir los errores de Zapatero, sino que abundan en ellos con el naif planteamiento de una España federal. Es decir, para sortear un abismo, abren otro mayor. ¿A alguien le cabe en la cabeza que si no se respetan las leyes constitucionales actuales van a respetarse las de un estado federal? ¿Alguien cree realmente que esto acabará con el problema nacionalista catalán y vasco? ¡Un problema que está gangrenando el país! Pues el Estado de las Autonomías se hizo por el problema catalán y vasco y ahora se quiere hacer el Estado Federal por el problema catalán y vasco. España, al albur de dos de sus regiones. El error de Susana Díaz va en la misma línea que los errores anteriores.
            No habrá nuevo discurso mientras en vez de criticar a los demás la presidenta no comience haciendo una crítica de sus propios planteamientos. Pero esto significaría salir de la infatuación. Difícil si no imposible si atendemos a la Historia. Se acercan pues tiempos de nieblas y espejismos.

GREGORIO MORALES
Diario IDEAL, martes, 8 de octubre, 2013

martes, 1 de octubre de 2013

MEMORIA

«¡Pobres quienes sestean o gritan creyendo que así podrán ocultar lo que jamás puede ser ocultado!» 

Ilustración con que la revista "Scientific American" (octubre, 2013) acompaña la noticia de que el gusto y el olfato de los ratones pueden estar directamente relacionados con el esperma 
Memoria 

Nada cae en el olvido. Podemos hacer estallar edificios, quemar bibliotecas, hemerotecas, cinematecas, destruir billones de discos duros, podemos incluso matar testigos, pero los recuerdos y emociones permanecen. Es como si la materia tuviese la cualidad de conservar indeleble rastro de lo que ha sido, como si la luz de los acontecimientos no sólo se expandiera al exterior, sino también al interior, de manera que, igual que podemos rastrear el pasado del Universo con telescopios, también podríamos rastrearlo con microscopios.
Los descubrimientos que lo demuestran se van sumando en progresión geométrica. El último: si le cortamos la cabeza a una planaria (un tipo de gusano planiforme), regenera una nueva… ¡que sigue conservando los recuerdos de la anterior! Luego la memoria no está sólo en el cerebro. ¿No hemos oído de personas con corazón trasplantado a las que embargaban recuerdos del donante? La memoria está extrañamente imbricada con cada uno de nuestros átomos, de forma que, si visitas el corazón, visitas los recuerdos, y si vas a los recuerdos, vas al corazón.
Unos científicos de Filadelfia acaban de hacer público que los espermatozoides tienen gusto y olfato, hasta el punto de que la inhibición de los correspondientes genes en un grupo de ratones ha imposibilitado su reproducción. Del gusto y del olfato a los espermatozoides, del corazón a la memoria. Todo está interrelacionado, no hay compartimentos estancos, el mundo es un holograma donde la más pequeña parte contiene el todo.
Patéticos por tanto quienes tratan de hacernos olvidar. ¡Imposible! Todo habla, todo descubre, todo revela. Allí va Fulanito con sus temores, filias y fobias, pertrechado de sus secretos, creyendo que su mente es una invulnerable cámara de acero, pero no se apercibe de que todo su cuerpo grita lo que es. Entras en una casa, vas a una ciudad, recorres un país, y no tienes necesidad de historiadores ni de carteles ni de aplicaciones para conocer su carácter, su pasado, su presente y su futuro.
Esta memoria invencible, biológica, genética y mineral, es el azote de los narcisistas, de los farsantes, de los políticos, de los dictadores. ¡Cómo querrían borrar lo que no les gusta o les subleva! Y lo han intentado hasta extremos trágicos, tergiversando o reescribiendo la Historia, destruyendo estelas y documentos, abatiendo construcciones, quemando libros, fotos, películas, masacrando etnias… ¡Inútil todo!
España conserva memoria de su agridulce existencia y esto tampoco podrá ser borrado, y, aunque se la parta en mil trozos, la memoria seguirá estando en cada uno de ellos. Sólo los analfabetos o los cándidos creen en la desinformación o en el borrón y cuenta nueva. Imaginan que todo está en el cerebro y, cuando piensan haber sajado el pretérito, no comprenden que sigue aquí y más poderoso por cuanto se le ignora. Sólo a quien respeta a los testigos le es concedido el don de no acatar sus órdenes. Por eso, los pactados silencios e ingenuos olvidos de la Democracia trajeron la pérfida pervivencia del franquismo.
¡Hay que recordar, recordar, recordar! Como no podemos despachar la memoria, mejor sentarla a nuestra mesa. Si desdeñamos al hada madrina, su despecho nos dormirá cien años. Tal vez por eso España vive en permanente pesadilla. ¡Pobres quienes se entregan al sopor o al griterío creyendo que así podrán ocultar lo que jamás puede ser ocultado!
GREGORIO MORALES
Diario IDEAL, martes, 1 de octubre, 2013