Uno de los proyectos museísticos de Mª del Mar Franco en colaboración
con el ayuntamiento socialista de Torvizcón (Granada)
Igualdad al poder
Si Iván Chaves ha sacado réditos de su papá y ha hecho suculentos negocios terciando ante cajas de ahorro y organismos de la Junta, ¿por qué otros van a ser menos? Si él hace, yo hago, tú haces, nosotros hacemos...
Esta es la igualdad inmarcesible que proclaman desde los púlpitos. Como Paco Cuenca y su pareja, Mar Franco. El chico es una lumbrera y hay que ponerlo en valor, ¿no? Así que, en 2007, tras ser nombrado delegado de Obras Públicas, su partenaire montó la empresa Artefacto Gestión Cultural, para la promoción de museos. Una bagatela. Sólo por aprovechar también la experiencia de su cuñado, Pablo Suárez, que a la sazón era director general… de Museos. Todo en casa, como debe ser.
O como el concejal Vicente Aguilera, compitiendo por los palcos semanasanteros en igualdad de condiciones… con su hermano. La empresa Tu Evento, creada ex profeso dos días antes de que expirara el plazo para la concesión. ¡Asombrosa justeza! Asombroso también que adivinaran punto por punto el deseo de las cofradías.
La ilusión de todo empresario es hacer negocios. ¿Y con quién los va a hacer mejor que con los iguales? Aguilera, con el Ayuntamiento del que es concejal. Cuenca, con la Junta, de la que ha sido cuatro años delegado. Mientras ellos están secuestrados por la política (¡pobrecitos!), sus resignados familiares se dedican a los negocios. Los sacrificios tienen que servir para algo.
Estos políticos están tan entregados al pueblo que, en un preclaro acto de solidaridad, inmolan la división entre lo público y lo privado. ¿Qué de malo hay en que Mar Franco utilice los cuatro contactos de Paco Cuenca o de su cuñado para sacar adelante su empresa? Pueden hasta aprovechar el mismo viaje. En Lobras, por ejemplo, Cuenca inauguró un museo subvencionado por la Junta… y diseñado por su mujer. ¿Y no va a utilizar el hermano de Aguilera la información diligentemente recabada por el fraterno concejal? Esto se llama igualdad. Con arrodillarse ente la Aurora, en el caso de Aguilera, o incorporar al discurso los preceptivos aes y oes, en el caso de Cuenca, la cosa queda redonda. Igualada, vamos.
Con emprendedores así, remontaremos la crisis en un santiamén. Se comprende que la Consejería de Innovación, de la que justamente Cuenca fue delegado hasta hace unos días, gloríe en su web el quehacer empresarial de Mar Franco. O que Torres Hurtado levante una calle para que Aguilera ponga cómodamente sus palcos.
Al pueblo, el rigor de la ley. A los familiares, la facilidad de los negocios. ¡Anda que no es un reparto equitativo! Si la mujer de Cuenca negocia con los ayuntamientos del PSOE, el hermano de Aguilera lo hace con los del PP. Y punto en boca: yo negocio, tu negocias, el negocia… Ecuación mágica, envidia de los matemáticos del mundo. No cabe duda: ¡La igualdad esplende en Granada!
Diario IDEAL, martes, 10 de mayo, 2011
Bien dicho, o mejor ¡bien denunciado!
ResponderEliminarNo hay que callar ante los abusos.
Un abrazo