martes, 24 de junio de 2014

¡CACHO NEGOCIO!

«Ya sabéis: os vendo mi piso y luego os lo alquilo» 

Susana Díaz, genio financiero de España 

¡Cacho negocio! 

¡Es el negocio del siglo! La idea me la ha dado la Junta de Andalucía, pionera en todo… ¡Peazo Junta! Es genial: como necesitan reducir el déficit y manejar pasta, van a vender una tanda de inmuebles oficiales, entre ellos el bello palacete de la Bomba, pero eso no significa que se marchen ¡no, no! El ardid consiste en que posteriormente alquilan el inmueble a los compradores. Primero reciben un pastón, pongamos 3 millones de euros, que es el precio por el que sale el palacete, y luego lo siguen disfrutando aunque ahora alquilado a los nuevos dueños, según prometen por 211.000 al año, ¡y hala, a gastar el resto alegremente!
Voy a hacer lo mismo, voy a vender mi piso por unos 400.000 euros y luego lo alquilaré pongamos por 300 al mes, ¡y me voy a raspar una vida! Recorreré medio mundo, que ya está bien de tener anclado el culo en esta ciudad que te atrae fatalmente y te mata con la demagogia del señor Hurtado, Sebastián Pérez y demás obedientes secuaces.
¡Pero eh, eh, no me agües la fiesta, quillo, que para eso están las facturas de “Emasangra”! ¿Que qué voy a hacer dentro de 10 años cuando se me acaben el alquiler y la pasta? ¿Que qué va a ser de mi mujer y de mis hijos? ¡Vamos, no seas cenizo! Ya sé que conoces el cuento de la cigarra y la hormiga, ¡pero 10 años son una eternidad! Ya veremos entonces, ¿vale? Si la Junta de Andalucía, que es sabiamente previsora, pasa de lo que ocurrirá, ¿me voy a preocupar yo? La Junta practica el glorioso precepto del “carpe diem”, es decir, aprovechar el presente, y al futuro que le den ¿y no voy a hacer yo lo mismo? Cuando se cumplan los diez años y ya no pueda vivir en mi piso tras haberme gastado en renta lo mismo que recibí (¡bonico y perfecto círculo vicioso que te deja in albis!), pues que arreen los que vengan detrás, que sajen con más impuestos a los paganos del mañana que son los jóvenes de hoy, que cuadren el presupuesto los junteros del mañana que son también los jóvenes de hoy, y que se hunda Andalucía y España si es necesario, ¡pero nosotros calentitos de momento! ¡Así que dentro de 10 años que apenquen otros! ¡Que mis hijos se gasten la pasta en comprarse un nuevo piso y otro para sus papás! ¡Y que me quiten lo bailao!
Además, no es sólo la maternal Junta la que lo hace, sino el extranjero, de donde lo han importado, ¡y es que todo lo del extranjero es bueno, bueno, bueno! Yo sabía que esta Susana Díaz iba a traer ideas renovadoras a Andalucía. Yo sabía que iba a reducir el déficit y mira de qué manera tan chula lo hace. De algo debe de haberle servido dedicar 10 años a su carrera en lugar de los cinco de cualquier mediocre estudiante. ¡Luego debe de saber el doble! Así que cierro los ojos y sigo su ejemplo.
Ya lo sabéis: vendo mi piso y, a quien me lo compre, se lo alquilo. ¡Difundidlo, por favor! Pero seguro que ya queréis una cita para hablar del negocio, ¿a que sí? Os espero mañana al mediodía en las Castañeda. ¡Traed la pasta!

GREGORIO MORALES
Diario IDEAL, martes, 24 de junio, 2014

martes, 17 de junio de 2014

MEMORIA ÍNTIMA

«Todo tiempo tiene sus injusticias y su silencio» 

Casino del Salón, luego reconvertido en biblioteca por la II República 

Memoria íntima 

Excelente mapa histórico de Granada el que han confeccionado los profesores Miguel Ángel del Arco, Claudio Hernández, Jorge Marco y Mª Candelaria Fuentes. Abarcando el período de 1931 a 1979, saca del olvido hechos extraños, curiosos, terribles, groseros, ridículos, hasta el punto de que esta tierra que creía conocer se me antoja ahora una dimensión perdida, otro país.
A través de una página web certeramente dispuesta (www.mapamemoriagranada.es), estos cuatro investigadores han logrado que los hechos vuelvan a cobrar vida, se agiten, nos salgan al paso en los más impensados lugares, como el convento de Zafra, donde en pleno franquismo estuvo refugiado el guerrillero anarquista Villa; o el barranco del Abogado, cuyos vecinos protegieron a los audaces hermanos Quero; o la plaza de la Mariana, donde se celebró la llegada de la República tras proclamarse en la plaza del Carmen; o la biblioteca del Salón, un casino reconvertido por la pasión instructora de la República; o el teatro Cervantes, centro de difusión propagandística de los sublevados; o la Carrera, donde estuvo la sede del partido de Azaña…
Así que puedes trazarte la ruta que desees, por las avenidas, callejones y atajos que se te antojen, pero vayas por donde vayas, la marcha resulta apasionante. Yo creía saberlo todo de la Granada en que he crecido, pero mi merodeo me ha hecho comprender la soberbia. Me admiran la independencia y el valor con que estos cuatro investigadores han abierto el pasado, la pericia con que han rescatado lugares, personas y hechos sepultados por el polvo de muchas décadas, y la limpieza con que los han puesto ante nosotros, echando a un lado la enjundiosa erudición o la cómplice banalidad, y encima sin victimismos de ningún tipo.
Voto a bríos que no suele haber estudios tan bien hechos en nuestra triste patria, porque o vienen larvados por el sectarismo, o son sospechosamente parciales, o están mal expuestos, o tienen un insufrible aire de prédica. Nada que ver con este trabajo meritoriamente auspiciado por UCAR-Granada y subvencionado con una cantidad testimonial por la Junta de Andalucía, ¡y es que el esfuerzo invertido vale mucho más!
No puedo impedir evocar el fusilamiento de mi abuelo y mi tío durante los primeros días de la rebelión, el uno, alcalde socialista de Alomartes; el otro, hijo y miembro destacado de las Juventudes del PSOE, y cómo el hecho me fue celosamente hurtado hasta que me enteré de él en la treintena. Siento una inmensa alegría por ellos y por mí, ¡porque ya era hora de compensar el silencio que debieron padecer los hijos para protegerse y proteger a los nietos! La memoria que llaman histórica es nada menos que la memoria íntima de muchos. Confío en que cuando se confeccione el mapa de la provincia, los nombres de ambos aparezcan ligados a la Casa del Pueblo de Alomartes, donde tantas energías dejaron, o a la cárcel  Modelo de Granada, donde consumieron muchísimos meses, algunos de ellos junto a Alejandro Otero.
Conforta pensar que el tiempo siempre hace justicia y que por tanto también la hará con el presente. Aunque quizás ya no estaremos vivos, lo que ha sido fieramente cubierto saldrá a la luz como ahora. Pues todo tiempo tiene sus injusticias y su silencio. ¡Todo tiempo echa tierra sobre algo que luego debe ser rescatado!

GREGORIO MORALES
Diario IDEAL, martes, 17 de junio, 2014

martes, 10 de junio de 2014

MONARQUÍAS

«En España no hay una monarquía, sino mil» 

Las monarquías proliferan en España 

Monarquías 

El problema de la monarquía en España no es que hay una, sino que hay miles. La forma de organización suprema de un Estado es un símbolo poderosísimo que reverbera hasta en el más escondido reducto de la sociedad. La monarquía se refracta así en mil monarquías y cada una de ellas a su vez en otras mil monarquías, en una progresión geométrica que acaba embotándolo todo.
El rey ha estado 39 años en el poder, pero todos conocemos políticos que llevan los mismos años pegados al erario público y que aún seguirán emulando hasta la muerte la cualidad vitalicia de un monarca. Al trono se llega por sucesión, sin un refrendo, ¿pero no ha llegado de forma parecida Susana Díaz a la presidencia de Andalucía? Fue elegida por Griñán, y su proclamación como candidata se hizo en unas primarias precipitadas, evidentemente amañadas por el Aparato. Lo mismo ha ocurrido con su pobre antagonista, Moreno Bonilla, éste elegido simplemente a dedo por Rajoy. ¿Y el Parlamento y el Senado? Son los reyezuelos que reinan en cada partido los que toman las decisiones, que luego votan dócilmente sus lacayos. Hay monarquía en la Universidad, cuando son los hijos quienes acceden a las cátedras de los padres y de los abuelos. Hay monarquía en los consejos de administración de las empresas, la hay en los organismos del Estado. ¡Monarquías por doquier, en todas las esferas y a todos los niveles!
En los puestos claves del país se instalan, pues, aquellos que mantienen una relación sanguínea, sentimental o ideológica con los poderosos que los anteceden, de modo que la organización monárquica permea toda la pirámide, desde lo más bajo a lo más alto. Es comprensible la merma de España y su postración cuando el talento y la creatividad encuentran de modo sistemático cerradas las puertas, esas celosas puertas que sólo se abren por motivos ajenos a las necesidades reales.
¿Con qué derecho exigimos que la excelencia triunfe si en la máxima institución del Estado cuentan los genes? ¿Podemos pedir a los ciudadanos lo que no le pedimos al jefe del Estado? La cuestión crucial entre monarquía o república no radica en el coste de la primera, que puede ser más o menos elevado según lo que decida el país, ni en que también hay repúblicas bananeras, sino en que los peldaños que ascienden a la cima de la montaña deben estar expeditos para quienes deseen transitar por ellos. De este modo se ofrece el saludable mensaje de que, primero, no hay sagrarios vedados; y segundo, que el único requisito para penetrar en ellos son la preparación, la voluntad, el afán de servicio o la ambición.
El mensaje es aún más trascendente en los países mediterráneos, tan dados al enchufe y al nepotismo, por lo que la monarquía les suele ser letal, ya que alimenta sus más ancestrales defectos. La monarquía planta ante los atónitos ciudadanos la contradicción que se establece entre lo que necesita y anhela un país y su negación radical en la cumbre de la pirámide. Los elogios desmedidos de estos días a la institución, esas unanimidades sospechosas entre la casta privilegiada, tienen como misión enterrar la consciencia que ha comenzado a abrirse en el pueblo. ¡Ninguna de las miles de monarquías que prosperan felizmente en España quiere desaparecer!

GREGORIO MORALES
Diario IDEAL, martes, 10 de junio, 2014

martes, 3 de junio de 2014

ESPAÑA SIN METÁFORAS

«¡España está contaminada por falta de metáforas!» 

El pirata de Espronceda, libre y maldito, trocado en sumiso chihuahua
Composición fotográfica: Lo Real Invisible 

España sin metáforas 

Frecuento los cenáculos literarios madrileños, voy al Centro Callao, al Ateneo, al Hotel de las Letras, a la Esquina del Zorro, y por lo general encuentro inania en las voces de los poetas y escritores que leen sus textos. Es como si una galerna de superficialidad y conformismo lo hubiese arrasado todo. Tópicos en las palabras de los presentadores. Rupturismo de pacotilla en las palabras de los presentados y, luego, en sus textos, verborrea, fútiles oraciones, afásica expresión. Y entre el público, resignación dócil, renuncia a cualquier crítica, el mismo apoyo necio de los secuaces políticos, y luego, a veces, los tristes libros esperando amontonados a que algunos incautos los compren. Igual en Granada, donde se trafica con los escritores como si fueran cromos, amontonándolos en los actos para así contrarrestar la poca entidad que se les supone, dando ofensivamente por sentado que su único pago es la vanidad, poniéndolos ignominiosamente en el mismo nivel que quienes se costean sus ediciones, en una Babel donde descuellan estentóreas las voces de impostores y saltimbanquis.
Décadas de “normalidad” en los literatos nos han conducido a este páramo, demostrando que la verdadera enfermedad es la ausencia de vuelo, de locura, de heterodoxia, de imaginación. ¿Puede extrañarnos que España se deshaga, que una sorda fuerza centrífuga la disloque? La literatura, la buena literatura, la literatura singular, es la sangre que corre por las venas de una nación. Sin embargo, lo que te encuentras hoy, tanto en Madrid como en Granada o en otras ciudades señeras, no es siquiera horchata, sino el agua turbia de los sumideros.
Los mismos que nos han conducido a este tedio de la razón, se han apresurado a afirmar que la literatura sólo es útil si renuncia a sus más potentes armas para acercarse al lector medio, lo que es tan absurdo como un laboratorio que descartarse el instrumental sofisticado para hacer sus experimentos accesibles a los legos. Sin tecnología avanzada, la ciencia contemporánea no puede profundizar, se estanca, se pudre. Sin metáforas singulares, la literatura contemporánea no puede profundizar, se estanca, se pudre. ¡España está contaminada por falta de metáforas!
Las excepciones resisten cercadas. Entre la autocensura de editores a quienes aterra arañar mínimamente el inconsciente colectivo, el aplauso falaz de la turbamulta literaria (hoy por ti, mañana por mí), el silencio cómplice de los críticos-autores y el aluvión de mediocres que ingresan con honores en la literatura gracias al dinero, la política o el marketing, la metáfora yace pisoteada, la luz se agazapa bajo la polución, y España se asfixia de conformismo, inercia y ramplonería. El bajel pirata de Espronceda, libre y maldito, trocado en sumiso chihuahua.
Como no tiene gran literatura ni metáforas audaces ni textos que escandalicen ni oraciones que descoyunten y nos saquen de la miseria moral, España se apaga con cansinos estertores, se fragmenta en histriónicos terremotos, va al abismo entre líderes de opereta y discursos de mercachifles. La España del siglo XVII estaba en decadencia, pero al menos tenía metáforas y, por tanto, tenía futuro. La España de la República fue apuñalada por una guerra civil, pero al menos tenía metáforas y, por tanto, tenía futuro. Esta España de hoy ha desterrado las metáforas y, en consecuencia, se deshace en pútridos escombros y prehistóricos clanes. ¡Sin metáforas, triunfan las bacterias!

GREGORIO MORALES
Diario IDEAL, martes, 3 de junio, 2014